Llegando incluso a condicionarnos la calidad de vida ya que son articulaciones que se implican en la mayoría de las acciones que realizamos en nuestro día a día. Los requerimientos de los deportes practicados en la actualidad, ya sea a nivel profesional como amateur junto con los traumas asociados a los mismos, hacen que nuestras rodillas sean una de las articulaciones más propensas a lesionarse. (Atletismo, fútbol, baloncesto,
deportes de carrera, ciclismo, triatlón, esquí, tenis,…) La obesidad también podría acarrear problemas en dicha articulación, ya que el exceso de carga hará que nuestras rodillas sufran en exceso. Y si a esto le unimos otros factores de riesgo como puede ser la inactividad, el envejecimiento o por qué no, realizar el deporte o actividad física inadecuada, el riesgo de lesión puede ser muy evidente.
Trabajos específicos en los cuales se está muchas horas de rodillas o de cuclillas soportando un estrés excesivo en las rodillas (albañiles, fontaneros, pintores, mecánicos…) suelen ser muy propensos a producir lesión en dichas zonas. Incluso podría producirse lesión en otras articulaciones debido a desequilibrios musculares en la rodilla y exceso de trabajo en otros músculos que cruzan la rodilla, pero a su vez controlan alguna otra articulación.